Quería verlo, pues no es lo mismo que te lo cuenten, y la verdad demasiado agobio, pues lo bueno de tomarte unas tapas, es hacerlo con tranquilidad y sin prisas, cierto es que lo que vimos era espectacular y lo que probamos buenisimo, nos tomamos un pulpo con setas, el ambiente una pasada, no cabía ni un alfiler, esperamos que la próxima vez que vayamos se pueda entrar con menos agobios, menos mal que dicen que en agosto no hay nadie en Madrid.
En Zaragoza si que no había nadie, solo los jóvenes que van a visitar al Papa, y nosotros, pasamos por el Calamar Bravo y estaban las mesas libres, no se puede dejar pasar la ocasión, la primera vez que me siento en una de sus mesas, y como no un bocata de Calamares Bravos, los de la foto.
1 comentario:
A mí también me agobia Madrid y estos días ni loca me pillan por allí....
El fin de semana pasado hemos visto peregrinos a espuertas en Zaragoza. Es verdad y la gente echando las muelas contra el gobierno por ese derroche de gasto para ver a Papa....
Los calamares insuperables. Fijo.
Yo me quedo con un bocata de calamares pero sin que sean bravos que el picante...
Pochoncicos.
Publicar un comentario